La palabra de hoy es: punzón. Vamos a descubrir qué es y para qué servía. Todas las regulaciones de los diferentes estados europeos para la punzonatura.

¿Qué es el punzón?

El punzón es una barra de acero duro. Tiene un extremo perfilado con una letra, número o sigla, que se utiliza para marcar los metales; se golpeaba sobre la lámina con un martillo de madera.

“La fuerza de los golpes y la forma de la punta son los elementos que determinan la intensidad y el tamaño del punto. Se forman barbillas de deformación. Si se dejan, los puntos tendrán la calidad de la punta seca… si se quitan tendrán la calidad del buril”

¿Para qué se usaba el punzón en el pasado?

La punzonatura nació de la necesidad de las corporaciones o del estado de tener el control del título del metal. Marcando el metal se garantizaba al consumidor y al productor la protección contra las falsificaciones.

Los punzones más usados eran:

• de la ceca relacionado con la calidad de la aleación
• del platero o joyero marcado con sus iniciales
• de la ciudad con el escudo, las iniciales o una marca característica de la misma
• de la dotación: indicada con números o una letra
• certificado del pago de impuestos
• punzón colocado por el propietario del objeto

La historia de los punzones

Los primeros punzones se usaron para la platería. Fueron introducidos a principios de la era cristiana en Roma y Bizancio. Durante la Edad Media, luego desaparecieron. Reaparecieron coincidiendo con el nacimiento de los estados nacionales europeos. Cada nación desarrolló sus propias reglas. Intentemos repasar brevemente la historia de cada país.

Inglaterra

Los más avanzados en el uso de los punzones eran los ingleses. En 1180 se estableció la Worship Company of Goldsmith en Londres. En 1327 esta obtuvo incluso poderes jurisdiccionales sobre la actividad de los plateros de Eduardo III. Ya desde 1300 en Inglaterra se había hecho obligatorio, mediante un decreto real, colocar una marca para garantizar la pureza de la aleación. El símbolo utilizado era una cabeza de leopardo (aunque más parecida a un león) coronada por una corona.

Francia

La punzonatura francesa también estaba muy regulada. Comenzó a practicarse en el siglo XIV. Se grababa la marca personal del artista; generalmente eran sus iniciales coronadas por la flor de lis parisina. Dependiendo de la ciudad, cambiaba el símbolo.

Alemania

La punzonatura alemana era muy compleja y sin caracteres unitarios. Esto se explica si miramos la situación política de este país, muy fragmentada.

La punzonatura se introdujo en el siglo XIV. En los objetos se marcaban los símbolos del artesano y de la ciudad. El más recordado es el oso de Berlín.

Austria

Aquí también la punzonatura fue bastante variada. En general los símbolos impresos eran los del artista, la ciudad, la fecha y las oficinas estatales de control del título.

Países Bajos

Los punzones neerlandeses eran muy detallados. En los metales preciosos de este país se encontraban no menos de cuatro marcas; simbolizaban la ciudad, el artista, la fecha y la provincia que indicaba la calidad del metal. El símbolo de los Países Bajos era el león rampante.

Dinamarca

También los punzones daneses eran muy detallados. Se encontraban las marcas de la ciudad, el artesano y la de control.

Italia

En Italia la situación era muy compleja. La presencia de numerosos estados no permitía una visión unitaria sobre la punzonatura. En una de nuestras páginas del diccionario de antigüedades ya habíamos hablado de la regulación de la punzonatura. ¿La recuerdas? La puedes encontrar aquí.

Un ejemplo

Después de esta visión general de los símbolos, queremos mostrarles una pieza presente en nuestra colección de antigüedades. Una bandeja de plata del siglo XX.

Bandeja de plata maciza polilobulada con fondo liso y borde ondulado. Asas en volutas. Marca de plata grabada bajo el borde y punzón del platero poco legible.

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