Desde que llegué a Di Mano in Mano, muchos me hablaron de lo único que era Mercanteinfiera. Admito que tenía muchas dudas, hasta que realmente fui.

En la Cooperativa, generalmente no me ocupo de transporte ni de ventas; a decir verdad, hago cosas totalmente distintas. Pero ayer, (Jueves 27 de Septiembre) junto a mis compañeros, bajé a Parma para mi primer Mercanteinfiera (que este año se celebra del 29 de Septiembre al 7 de Octubre).

Pero vayamos por orden. Mi día comenzó a las 4 de la mañana, ¡porque el que llega primero, tiene mejores lugares! (No tanto en los stands, que obviamente ya están asignados, sino para aparcar las furgonetas en las primeras filas y descargar mejor).

Desperté con jetlag y me dirigí a nuestra sede en Cambiago para subir a una furgoneta y partir rumbo a Parma. A las 6:30 llegamos y nos colocamos en las primeras filas: quien empieza bien…

Tan pronto como abrieron las puertas, todos los comerciantes estaban impulsados por la fiebre sagrada del montaje.

Algunos con pocos muebles, otros con furgonetas llenas de piezas únicas, otros con animales disecados; todos corren de un lado a otro tratando de terminar su stand lo antes posible… y comenzar las negociaciones.

Nosotros, que fuimos a Parma en equipo, terminamos de descargar y montamos dos stands (entre los más grandes del pabellón 3) a las 9. ¡Estamos casi listos para los récords Guinness!
Aprovecho la oportunidad para dar una vuelta por el pabellón 3 y maravillarme: nunca había visto tanto antigüedades de una sola vez.
Y pensar que aquí en Cambiago tenemos 5 almacenes llenos de mercancía, no somos precisamente pequeños…

Los stands son muchísimos y las piezas únicas aún más. Además de antigüedades, también hay muchísimos muebles de estilo moderno y obras de arte en cantidad.

Termino el recorrido y regreso a nuestro stand (¡que, de todos modos, es uno de los más bonitos!). Listos, preparados, vámonos de regreso a la base.
Ah, mis compañeros tenían razón: ¡Mercanteinfiera es realmente un evento especial!