Soriana, el sofá de imagen compleja conseguida con sencillez y coherencia
By Athina
Octava cita con el Icono del Diseño: después de la Senior de Zanuso, llega el turno de otro asiento especial: el sofá Soriana de los esposos Scarpa.
Él, hijo de artistas, ella, prometedora estudiante de arquitectura en Venecia. En 1959 se conocieron en los bancos de la universidad, donde ambos seguían el curso de mobiliario de Franco Albini… Desde ese momento nació una colaboración laboral y sentimental que unió a Afra Bianchin y Tobia Scarpa para toda la vida (¿no les dan ganas de poner ojitos de corazón? A nosotros sí).
Refinados y sofisticados, los dos diseñadores venecianos fueron protagonistas de la escena cultural y artística italiana del siglo pasado.
No se unieron nunca a movimientos o modas pasajeras: utilizando materiales nuevos y tecnologías de vanguardia, pusieron en el centro de su investigación estética la elegancia de las formas y la funcionalidad.
A lo largo de los años han colaborado con grandes empresas como Flos, Cassina, B&B Italia y Knoll.
El icono del diseño de esta semana es quizás el producto más exitoso y querido de los esposos Scarpa, galardonado en 1970 con el Compasso d’Oro por la “complejidad de la imagen lograda con medios constructivos y técnicos de notable simplicidad y coherencia”.
¿La idea detrás del proyecto? “Envolver en una tela un montón de lana haciendo un gran bulto y darle un soporte y una forma (informe) simplemente con una prensa metálica externa que lo agarre. La base de apoyo es una delgada placa de madera.”
La descripción de Scarpa, aunque juguetonamente y despiadadamente objetiva, no hace justicia a la belleza de esta pieza.
Con el marco metálico cromado, el suave acolchado de espuma de poliuretano (que en esos años comenzaba a ganar terreno), los revestimientos disponibles en lana, cuero o terciopelo, este sofá es una perfecta combinación de comodidad y elegancia.
El «nuestro» trío de Soriana en los sets fotográficos de Cambiago
Este “bulto” es una pieza con una personalidad sofisticada y, al mismo tiempo, deliciosamente alegre. Ideal para quienes quieren darle vida y un sabor refinadamente retro a su salón, sin renunciar a la comodidad.
Como siempre, ya estamos trabajando en la cita de la próxima semana: si tienen consejos o sugerencias, serán bienvenidos.
